Los Southern Culture on the Skids llenaron La [2] de Apolo el sábado 4 de abril con su propuesta fresca e irreverente. Rick Miller, Dave Hartman y Mary Huff siguen demostrando, a través de su técnica y su gran sentido del humor, que el rock’n’roll es muchas cosas pero sobre todo diversión.

Llegando de una larga sobremesa un sábado al atardecer, qué mejor sorpresa que encontrarse con la sala [2] de Apolo llena para acoger a los SCOTS, una de las bandas de rock’n’roll más divertidas de los últimos veinte años. No obstante estén en activo desde 1983, los de North Carolina no han perdido ni una pizca de gracia: Rick Miller, el frontman y guitarra del grupo, se presentó vestido como el típico turista inglés que ha venido a Barcelona para pasar un fin de semana con su camisa de flores y sombrero de paja. Mary Huff, ultra maquillada y con un llamativo peinado, entretenía al público con su bajo y cantando en algunos temas.

No obstante su aspecto estrafalario, los SCOTS dejaron claro desde un buen principio por qué son tan respetados en esto del rock’n’roll: tocaron diferentes estilos, pasando del rockabilly al surf, del country al rock de los orígenes, todo con la misma maestría y sin dejar de coquetear con un público muy entregado. Sonaron temas de la banda como “Voodoo Cadillac”, “Soul City”, “69 El Camino”, “Corn Liquor” y una versión de “Life’s a Gas” de T-Rex.

Al final, como ya es costumbre en sus espectáculos, invitaron a unas chicas del público a subir al escenario para bailar con ellos y tirar pollo frito al personal de las primeras filas, mientras sonaba su “Fried Chicken”. De esta manera tan personal cerraban los SCOTS una divertida velada, en vista de su tour en EE.UU. con Los Straitjackets, a los cuales veremos muy pronto en Barcelona.