El gospel según The Mooney Suzuki
LA REFORMULACION PURISTA PERO FEBRIL CON QUE ESTOS NEOYORQUINOS
PROPICIAN OTRO PRESENTE PARA EL SONIDO SIXTIES GARAGE ESTA CAUSANDO
FUROR EN AMERICA. SU PRIMER ELEPE (VER RUTA 167) ES LA NUEVA BIBLIA
DEL HIGH ENERGY RHYTHM´N´BLUES.
Gospel como forma de energía, como vehícu-lo para llegar hasta
la experiencia mística, aquella en la que se exhorta a la participación
más allá de las pasivas convenciones de la cultura rock. The Make-Up
construyeron un (sospechoso) manifiesto de arte-como-medio-de-cambiar-la-vida.
Tim Kerr hizo lo propio con su Young Lions Conspiracy, edicto en
el que postulaba por la conversión ''del dolor y la depresión cotidianos
en una formidable y artística presencia- expresión''. Desde Nueva
York y producidos por este último, The Mooney Suzuki esgrimen el
arte del sentimiento como medio de discernir lo falso y lo auténtico.
Sammy James Jr. (guitarra y voz), D. Jones (bajo), Graham Tyler
(guitarra) y Will Rockwell (batería) han grabado para Estrus, aquí
Green Ufo´s, «People Get Ready», un mayestático álbum de milagrosos
efectos y curativas canciones. Comenta la jugada desde Manhattan
Sam Buonoaugurio, aka Sammy James, estudiante de arte transfigurado
en predicador de la Iglesia Adventista del Séptimo Garage.
La revista Mojo publicó una entusiasta
reseña de «People Get Ready». Por lo general la prensa británica
no presta demasiada atención a bandas americanas con un sonido tan
''arcáico'' como el de M.S. ¿Qué crees que les atrajo?
Nos hizo tanta ilusión que escribieran de nosotros en
Mojo. Mojo es como la forma suprema de literatura musical. La mayoría
de revistas americanas no tienen nada que hacer ante Mojo. Supongo
que sus redactores poseen unos apetitos más amplios y saludables.
En la prensa americana de gran tirada no puedes leer sobre John´s
Children, Pentagle, los Deviants o Bob Dylan. Ninguna revista americana
se ha dignado reseñar «People Get Ready». ¡Y qué! Que aparezcas
en papel satinado sólo significa que puedes pagar a un publicista
para que te monte chanchullos. Aparecer en Mojo ha sido la materialización
de uno de nuestros sueños.
La revista Mojo publicó una entusiasta
reseña de «People Get Ready». Por lo general la prensa británica
no presta demasiada atención a bandas americanas con un sonido tan
''arcáico'' como el de M.S. ¿Qué crees que les atrajo?
Nos hizo tanta ilusión que escribieran de nosotros en Mojo. Mojo
es como la forma suprema de literatura musical. La mayoría de revistas
americanas no tienen nada que hacer ante Mojo. Supongo que sus redactores
poseen unos apetitos más amplios y saludables. En la prensa americana
de gran tirada no puedes leer sobre John´s Children, Pentagle, los
Deviants o Bob Dylan. Ninguna revista americana se ha dignado reseñar
«People Get Ready». ¡Y qué! Que aparezcas en papel satinado sólo
significa que puedes pagar a un publicista para que te monte chanchullos.
Aparecer en Mojo ha sido la materialización de uno de nuestros sueños.
Como escritor de rock pienso que actualmente
la prensa es el último media donde puede tener lugar la discusión
articulada, la opinión rigurosa. Por el contrario, muchos sellos
y bandas consideran que el periodismo escrito no sirve para nada.
Tu cómo lo ves.
Las publicaciones europeas practican un periodismo inteligente
y perspicaz. La prensa americana es menos admirable en ese sentido,
pero resulta divertida si lo que pretendes es pasar el rato poniéndote
al día de la cultura trash/pop, de la cual soy un gran seguidor.
Indudablemente es un gran medio de difusión para un artista si éste
tiene posibilidad de usarla como tal. Estoy seguro de que muchos
periodistas americanos tienen cosas interesantes que escribir pero
la mayoría de las veces sus mejores artículos son descartados en
favor de cualquier compromiso con la moda.
Según se dice, The Mooney Suzuki se hicieron
a sí mismos, sin agencias ni mánagers. Lo normal es que el sendero
que lleva a una banda a grabar su primer disco sea un lecho de miserias.
Eso es porque nuestra biografía es una versión abreviada de la verdadera
historia. Quién querría leer de los montones de mierda que llegamos
a tragar el primer año. Ni a mi peor enemigo le desearía la experiencia
de sacar adelante una banda en el East Village. Ya salíamos a tocar
fuera de Nueva York y nos habíamos hecho con un público en otras
ciudades, y en la avenida A seguíamos tocando en salas vacías. Incluso
llevando ya un año pateándonos con éxito la costa este no éramos
capaces de encontrar a nadie que quisiera publicar nuestro disco.
Durante dos años estuvimos enviando cintas a todos nuestros sellos
favoritos, Estrus inclusive, y apenas recibimos respuesta salvo
un par de cartas fórmula. No fue hasta que tocamos con otras bandas
de Estrus que Dave (Crider) decidió enviarnos una nota. Mientras
tanto habíamos sacado algunos singles en sellos pequeños que no
obtuvieron ninguna repercusión.
La de Nueva York siempre ha sido una escena
dura pero productiva. ¿Hay algún indicio que presagie ahora mismo
una nueva era para el rock neoyorquino?
Actualmente el rock neoyorquino está padeciendo un poco de sobresaturación
y sobrepoblación. Hay una gran cantidad de gente creativa, motivada,
con talento, pero en una noche dada, tienes docenas de clubs, cientos
de bandas y un puñado de espectadores, todos ellos ocupados distribuyendo
flyers de conciertos de sus propias bandas. Es muy frustrante.
¿Te identificas de alguna manera con la
dilatada tradición rock de Nueva York?
¡Ahora te escucho! Si señor, desde Woody Guthrie buscándose la vida
en los estudios televisivos hasta Bob Dylan en su despertar, pasando
por The Blues Project, un desconocido Jimi Hendrix tomando el metro
del Village a Harlem y viceversa, Sun Ra y los discos de ESP, los
folkies y los bluesmen en la calle Bleeker, la Velvet en la Factory,
por supuesto CBGB's, Ramones, Heartbreakers y la No Wave de los
80, Sonic Youth, Beastie Boys, etc. ¡Qué jodida mitología! Durante
un tiempo quise ser la Velvet Underground. Ahora tenemos el toque
Ramones, supongo que por los cortes de pelo, o puede que por ir
uniformados, o vete a saber, por ser de Nueva York. No me importa.
Para mi el rock and roll y esta ciudad son indisolubles. Siendo
un chaval con una guitarra, no soñaba sólo con tocar en una banda,
soñaba con tocar en una banda de Nueva York.
El álbum de los neoyorquinos funde a MC5 y Fleshtones con fervientes
vocación garagera y pasión negroide
En M.S. la media es de 19 a 24 años. A
vuestra edad la mayoría de la gente está monopolizada por su época,
consumiendo la última moda. Me intriga saber como llegasteis a descubrir
que el rock tenía un pasado.
Los padres de Graham Tyler eran rock´n´roll hippies que
en los 60 y 70 tocaban en bandas, iban a conciertos en el Fillmore
-el East Fillmore, se entiende (N. del A.)- y tenían una gran colección
de discos. Todo eso le descubrió mucha música en su infancia, música
que por lo general la gente tarda un
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tiempo en conocer. Graham contestó a un flyer que yo hice porque
el nombre de los Stooges aparecía en él, y me introdujo a Music
Machine y otras bandas. Creo que incluso a pesar de las actuales
modas, en la subcultura del ''adolescente varón con su primera guitarra"
-profesores de guitarra, empleados de tiendas de música, hermanos
mayores, etc.-, el ''classic rock" goza todavía de un fuerte consenso.
Yo me hice con una guitarra porque quería aprender a tocar «Pinball
wizard». Me aprendí todas las canciones de los Who, luego de Led
Zeppelin y Hendrix, para pasar después a profundizar en Jimmy Page
y llegar hasta los Yardbirds, con los que me entero de que Page
tocó en «You really got me» y eso me lleva a los Kinks, y así sucesivamente.
El concepto M.S. podría resumirse en sentimiento
mod canalizado en garage americano. Sé de vuestra indiferencia hacia
el término ''mod'' y soy consciente de que a los músicos no les
hace gracia ser etiquetados, pero, ¿cómo definir el grupo a alguien
que no ha podido verlo ni oirlo todavía?
No soy de esos que no soportan verse reducidos a categorías.
Creo que el término garage describe sobre todo a adolescentes americanos
emulando bandas de la british invasion con más entusiasmo que pericia.
Por eso no creo que seamos mods, porque lo que hacemos nos convierte
automáticamente en garage. Y nuestras influencias parten de Yardbirds,
Cream, Kinks, Who, Animals, Them, etc. ¿Nos hace eso garage? Bien,
aquí es donde aparece la delgada línea que separa al garage del
proto-punk. Estamos muy inspirados en la Velvet y compartimos muchas
de las sensibilidades de MC5, en particular el amor por el primitivo
blues americano, el R&B y el R&R, y somos de Nueva York. ¿Somos
entonces garage-proto punk? Diría que nuestra principal motivación
es conseguir un espectáculo como el de James Brown. Supongo que
lo más preciso será decir que entramos en la categoría punk-funk.
Pese a homenajear en su nombre a los vocalistas
de Can, practican un intensísimo ''garage con mensaje''
Muchas de las bandas con base 60's son
facsímiles incapaces de vigorizar la música inyectándole una interpretación
personal. ¿Hubo algún esfuerzo consciente por vuestra parte para
conseguir ese sonido tan fresco que se respira en «People Get Ready»?
Para ser honesto, todo lo que hacemos es intentar recrear el
sonido de las bandas y discos que nos gustan. Mi actual actitud
es: al carajo, sé lo que quiero oir cuando escucho discos y eso
es lo que quiero oir también cuando toco.
Según el código de M.S., cuáles son los
valores clave de esa década para comprender por qué su música todavía
cautiva a las nuevas generaciones.
Mucha gente se hace un flaco favor minimizando los valores de los
60 en cliches simplistas como ''amor libre, colega'' o ''que se
joda el sistema, tío''. Uno de esos clichés más común estos días
es el de ejemplo de arrepentimiento o verguenza ''por haber estado
allí haciendo aquello''. A ese respecto me encanta la charla de
Sly Stone en el escenario de Woodstock, dirigiéndose a un público
que no quiere corear sus canciones porque podría parecer desfasado.
Sly les dice: ''Debeis recordar que no se trata de una moda, sino
de un sentimiento. Si fue bueno en el pasado, también lo será ahora''.
No tenemos ningún prejuicio cronológico. Si es bueno hoy, es bueno.
Si lo era antes, todavía lo es.
«Llevábamos esperando dos años para grabar un disco con Estrus
y para que el legendario Tim Kerr nos produjera. Pasamos mucho tiempo
trabajando arreglos y armonías, de tal modo que una vez en el estudio
pudiésemos sacarlo todo de golpe. Las sesiones fueron una vomitona»
(Sammy James)
MC5 es una de las influencias más reconocibles
en «People Get Ready». Muchas canciones están en mayor o menor grado
infectadas por el pulso ''revolucionario'' de los Cinco.
Nos gusta MC5, de eso no hay duda, pero hay bandas que
están mucho más metidas en su rollo que nosotros. No me preocupa
demasiado el aspecto White Panther/John Sinclair del asunto. «Kick
Out The Jams» es un gran disco, pero tenemos más en común con «Back
In The USA». Nuestras guitarras se inclinan más haciá el british
blues primerizo que a sonar como MC5. Graham Tyler tiene una Crestwood,
sí, pero somos la banda menos Marshall de todos los tiempos. Lo
nuestro no es un rollo de ''monster Detroit guitar'', estamos más
próximos a los Yardbirds. Lo que tenemos en común con MC5 es el
sentido del espectáculo, sudar el concierto hasta la deshidratación,
como James Brown.
Totalmente de acuerdo con esa conexión
MC5-soul- Mooney Suzuki. En el disco se respira una tensión muy
negra...
Yo ya estaba familiarizado con Brown y Otis Redding cuando
conocí a MC5, así que esa influencia fue de las primeras cosas que
al principio me gustaron de MC5. Después, en el instituto, toqué
mucho material de Brown y de Sly. Pero no quería acabar haciendo
''white boy soul''. MC5 me ayudaron a reconsiderarlo y me inspiraron
para empezar a explorar de nuevo la música negra.
Ha sido una sorpresa encontrar esa referencia
a la mitología griega en «My dear Persephone». El rock y la cultura
clásica no suelen hacer migas...
El rock´n´roll tiene sus raices en el gospel, ha tomado
mucho de su lenguaje, de modo que en el rock se encuentran unas
raices bíblicas. Nada hay más rock´n´roll que Chuck Berry tocando
«Beautiful Delilah», una referencia directa a la mitología griega
(en cualquier caso filistea, N. del A.). El paisaje literario de
Dylan está plagado de personajes clásicos: Abraham, Julio César,
Desdémona, etc...Yo creo que rock y cultura clásica siempre han
sido compatibles. Ojala la hubiera estudiado más cuando podía, en
lugar de dedicarme a grabar con una navaja ''Pink Floyd molan''
en mi pupitre.
Copyright
RUTA 66, 2001 - Nº 168
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